martes, 11 de noviembre de 2014

BALADA TRISTE DE TROMPETA (2010)



Dir.: Alex De La Iglesia

Drama / Comedia negra

España / Francia

107 Min.- Color

35 Mm. Digital

Sonido: Dolby digital.

Música: Roque Baños

FX.: Pedro Rodriguez y equipo.




Guión: Alex De La Iglesia

Prod.: Tornasol Films, La Fabrique 2, uFilm, Canal + España, Castafiore Films, TVE, Le Tax Shelter du Gouvernement Fédéral de Belgique

Intérpretes: Carlos Areces (Javier), Antonio De La Torre (Sergio), Carolina Bang (Natalia), Manuel Tallafé (Ramiro), Alejandro Tejerías (Motorista Fantasma), Manuel Tejada (Jefe de Pista), Enrique Villen (Andres), Gracia Olayo (Sonsoles), Sancho Gracia (Coronel Salcedo), Paco Sagarzazu (Anselmo), Santiago Segura (Padre de Javier), Fernando Guillen Cuervo (Capitán Miliciano), Jorge Clemente (Javier niño), Fofito (Payaso listo/tristón), Fernando Chinarro (Abuelo), Sasha Di Bendetto (Javier 1937)……

Después de tocar fondo con “Crimen Ferpecto” (2004) y resurgir lejos de lugares comunes en “Los crímenes de Oxford” (2008), Alex De La Iglesia se embarcó en este proyecto enloquecido con la idea de recuperar lo mejor de su cine y exorcizar fantasmas personales prescindiendo de su guionista habitual Jorge Guerricaechevarria y dando rienda suelta a toda su creatividad, talento, mitomanía y tendencia al exceso.

Javier es un niño que presencia como su padre, payaso de profesión, se ve envuelto casi por casualidad en una sangrienta y desigual contienda entre soldados republicanos y nacionales durante la Guerra Civil Española. El hombre es encarcelado y atormentado por la amargura inculca en la mente del niño la idea de la venganza.

Pasados los años Javier coloca un explosivo en las obras del Valle de los Caidos donde su padre a la fuerza está trabajando. Como consecuencia de este acto el hombre muere ante sus ojos y el asumirá para siempre la condición de payaso triste.

Son los 70`s, Javier ya es un hombre y busca trabajo en un circo de Madrid. El payaso tonto, que es la máxima estrella de la compañía se ha quedado sin compañero así que el payaso triste es contratado sin demasiado entusiasmo.

El nuevo miembro de la familia circense se va dando cuenta de que Sergio, el payaso tonto, es un psicópata que aprovecha su status para someter a todo el elenco a su voluntad y capricho. Especialmente doloroso es el trato que recibe su novia la bella acróbata Natalia que desde el primer momento cautivó al recién llegado con su simpatía y exuberante sensualidad.

Ella encuentra en Javier el cariño que no le proporciona el cabronazo de Sergio pero es incapaz de renunciar a él y dejar su condición de sumisa sexual.

La tensión en esta relación triangular va creciendo hasta que una noche termina por estallar.

El maquillaje ya no podrá disfrazar las heridas ni la descomposición interior de los payasos. El conflicto es irresoluble y está abocado a una confrontación definitiva.

“Balada triste de trompeta” se podría despachar como hacía Angel Martin en su espacio de crítica de cine de “Se lo que hicisteis…” con una frase: “El guión es una mierda y la película es muy mala”. Pero en este blog no nos vamos a quedar nunca en la superficie porque creemos en el trabajo y la ilusión que se deja la gente para la elaboración de una película y en esta historia hay mucha ilusión y mucho esfuerzo. 

Pero el espectador tiene que poner un poco de su parte y tratar de empatizar y entender. Mas allá de lo que vemos, del gran espectáculo visual, tenemos que disfrutar de las imágenes con los restantes cuatro sentidos y descifrar lo que se nos quiere transmitir.

La barrera que nos separa de la comprensión de la película es el enfrentarnos a ella como a una historia convencional. Error, en este film es todo metáfora y simbolismo.

Partiendo del hecho de que Alex De La Iglesia es vasco. ¿Sabes por donde voy? Si no lo pillas no hace falta que sigas leyendo.

En España hubo un conflicto armado, una carnicería que marcó a cientos de miles de familias y a sus descendientes.

Algunos de los descendientes se negaron a que las heridas dejaran de sangrar aunque hubiera muerto el dictador.

Sergio y Javier son portadores de ese estigma, el payaso tonto la España de la violencia y la miseria, el payaso triste la España que quiere pasar página y dejar atrás el odio pero no puede porque como dice el Jefe de Pista: “Es este país que no tiene remedio”

Los dos son figurantes en el circo que es la vida. Les ha tocado a cada uno un papel y no pueden escapar de su destino.

Natalia es el premio a conseguir en la disputa y al mismo tiempo la víctima entre dos enemigos irreconciliables que al final son dos caras de una misma moneda. Es la madre que se ha desangrado viendo como sus hijos se mataban el uno al otro.



Este en mi opinión es el mensaje subyacente en el argumento.

En la plasmación de esas ideas es donde cojea un poco el film. Aunque el envoltorio es brillante, emotivo y ofrece ramalazos de genialidad. Tal vez De La Iglesia debería haber sido un poco flexible, no hacer un film tan íntimo y personal y haber recurrido a un buen guionista para redondear el acabado. O no. Tal vez lo hizo siendo consciente de sus limitaciones y a sabiendas de que no le van a comparar con Buñuel, Saura, Erice o Berlanga.

Vamos primero con los detalles que no me convencen de la película.


-Me chirría escuchar la palabra “facha” en 1937. Es una palabra que deriva del término “faccioso”, que es como en la España de aquella época se denominaba a los “fascistas” leales a Franco, identificados con el “fascio” italiano. Yo no he podido aclararme respecto al momento de la historia cuando “facha” se convierte en vocablo popular. Puedo remitirme a literatura o documentos de la época como esta página del periódico “Ahora” que reproduzco aquí al lado y me remito también a mi experiencia personal. A mediados finales de los 70 ya se utilizaba la palabra “facha” por la gente joven para designar de forma despectiva a gente de ideología derechista o reaccionaria. 






Pero mi abuelo era militar retirado y vivió la época de guerra que vemos en la película. A veces me llevaba con él al bar donde se reunía con sus amistades de tertulia, vino y cerveza. Unos eran republicanos y otros franquistas. Jamás les escuché la palabra en cuestión. Sí que quedaron grabadas en mi memoria otras como: fascista, franquista, falangista, nacionales, rojo, republicano, comunista, miliciano, maquis… pero “facha” nunca. Hay que tener en cuenta que el pueblo en aquellos años, hasta los de más humilde condición, se expresaban mejor y tenían un vocabulario más extenso en líneas generales que en la actualidad.

En todo caso supongo que Alex De La Iglesia cuenta con medios para documentarse más y mejor que este humilde aficionado.



-El chiste que cuenta Sergio en el bar me decepciona porque se parece sospechosamente al que cuenta el Joker en la novela gráfica “Arkham Asylum” (1989) de Grant Morrison y Dave McKean.

-Es demasiado evidente que con “Balada triste de trompeta” el director ha retomado y ampliado ideas ya presentes en “Muertos de risa” (1999).

-Me hubiera gustado ver alguna actuación de Sergio y Javier ante el público en la arena del circo. Resulta incomprensible que no haya ninguna.








Lo bueno de la película es todo lo demás:

-La realización espectacular con secuencias muy sugestivas y muy bellas imágenes. Desde los títulos de crédito, un collage de imágenes de la cultura popular en la memoria del país.

-La historia se centra en cuatro personajes: Javier y su padre y Natalia y Sergio. El resto aunque como comparsas de apoyo están impecables. Manuel Tejada, Manuel Tallafe, Enrique Villen, Gracia Olaya… secundarios de lujo.




-Sergio un quinqui metido a payaso porque es un tipo antisocial y malasombra.

-Natalia, la bella infeliz esclava del placer necesitada de amor.




-Punto y aparte merecen Carlos Areces y Santiago Segura. El maestro y el alumno aventajado. Con permiso de un sorprendente Fofito. Gran idea de Alex De La Iglesia haberles dado estos personajes y enfrentarlos. La escena de la película de Raphael en el cine es tremenda.




-Aunque probablemente uno de los mejores momentos de la película sea el principio cuando se enfrentan los republicanos a los nacionales y Santiago Segura se abalanza de forma suicida contra una multitud de militares profesionales.




-La escena de Javier en el elefante, Sergio y el niño.

-Cuando Sergio utiliza a Javier para obtener el premio en el juego de la feria es una de mis secuencias favoritas.

-Javier animalizado y convertido en sabueso de caza.





-La transformación del payaso triste, entrañable aproximación al fantaterror clásico y eterno.

-Toda la parte final, brillante in crescendo que termina amargamente.



“Balada Triste De Trompeta” es una película muy humana porque con sus defectos y  virtudes le coges cariño. 
El cine entendido de esta forma arriesgada e imaginativa es el mayor espectáculo del mundo.



Notas:

-Esta película se realizó en parte en la “Ciudad de la Luz” de Alicante. Será muy lamentable que la crisis y la corrupción se lleven por delante este gran proyecto.

-En 2010 se estrenó también el film de Emilio Aragón “Pájaros de papel”. Una película que en ciertos aspectos tiene bastante que ver con “Balada triste de trompeta”. Más formal pero bastante recomendable.











Calidad cinematográfica:  7


Psicotronia:  7


Gore:  6

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