domingo, 3 de febrero de 2019

WATCHMEN (2009)



Dir.:  Zack Snyder

USA.- Technicolor

162 min. / 186 min. / 215 min.

Drama / Thriller / Ciencia ficción / Superhéroes

Imagen: 2.39 : 1.- Panavisión.- 35 mm. remasterizado IMAX a digital 70 mm.

Sonido:  SDDS / DTS / Dolby Digital / Dolby

Música:  Tyler Bates

Maquillaje y F.X.: Greg Cannom, Will Huff y un amplísimo equipo y varias empresas.


Fotografía:  Larry Fong

Guión: David Hayter; Alex Tse.- Adaptación del cómic “Watchmen” de Alan Moore y Dave Gibbons

Producción: Lawrence Gordon, Lloyd Levin, Deborah Snyder, Wesley Coller

Prod. Co.: Warner Bros., Paramount Pictures, Legendary Entertainment (in association with)

Lawrence Gordon Productions, DC Comics

Presupuesto:  $130,000,000

Recaudación mundial:  $185,258,983

Estreno en España:  6 Marzo de 2009         

DVD: Universal, Warner, Paramount según país y edición (widescreen, 2 discos, director`s cut, Relatos del carguero Negro etc . En España la primera edición en DVD es de Paramount.

Frase promocional USA: “Who will save us now?”; “From the visionary director of 300”;

Frase promocional España: “¿Y ahora quién nos salvará?”; “¿Quién los vigila…?”; “Del visionario director de 300”

Calificación moral: USA: R ; España: No recomendado menores de 18 años


Intérpretes: Malin Akerma (Laurie Jupiter / Silk Spectre II); Billy Crudup (Dr. Manhattan / Jon Osterman); Matthew Goode (Adrian Veidt / Ozymandias); Jackie Earle Haley (Rorschach); Jeffrey Dean Morgan (Edward Blake / Comediante); Patrick Wilson (Dan Dreiberg / Buho Nocturno); Carla Gugino (Sally Jupiter / Silk Spectre); Matt Frewer (Moloch); Stephen McHattie (Hollis Mason); Laura Mennell (Janey Slater); Rob LaBelle (Wally Weaver); Gary Houston (John McLaughlin); James M. Connor  (Pat Buchanan); Mary Ann Burger (Eleanor Clift); John Shaw (Doug Roth) ; Robert Wisden (Richard Nixon);  Jerry Wasserman (Detective Fine); William S. Taylor (Psiquiatra prisión); Chris Burns (Sicario bobo); Malcolm Scott (Sicario gordo); Danny Wattley (Recluso corpulento); Nhi Do (chica vietnamita); David MacKay (Niño asesinado); Chris Gauthier (Seymour); L. Harvey Gold  (Editor del New Frontiersman); Jay Brazeau (Vendedor de prensa); Jesse Reid (Adolescente en quiosco); Dan Payne (Dollar Bill); Niall Matter (Polilla) Apollonia Vanova (Silueta); Glenn Ennis (Justicia encapuchada); Darryl Scheelar (Capitán Metrópolis); Clint Carleton (Joven Hollis Mason); Mike Carpenter (Joven Moloch); Leah Gibson (Novia de Silueta); Brett Stimely (John F. Kennedy); Carrie Genzel (Jackie Kennedy); Greg Travis (Andy Warhol); Greg Armstrong-Morris (Truman Capote) ; Eli Snyder (Young Rorschach); Lori Watt (Madre de Rorschach); John Kobylka (Fidel Castro); Carmen Lavigne (Chica pacifista); J.R. Killigrew (David Bowie); Steven Stojkovic (Mick Jagger); Martin Reiss (Brezhnev); Frank Cassini (Marido de Sally); Zack Snyder (Comando en Vietnam); Danny Woodburn (Gran Hombre)


EN EL PRINCIPIO FUE EL COMIC:
No nos gusta entrar en comparativas con una película y la obra en que se inspira o adapta ya sea literaria, musical, gráfica etc. Cada expresión artística tiene unas formas y se convierte en una obra única e independiente acorde a la personalidad de su realizador y de su mayor o menor talento. Pero nos toca hacer una excepción (probablemente no será la única) con “Watchmen” dada la gran relevancia e influencia que ha tenido esta serie limitada para el mundo del cómic y de la cultura popular. “Watchmen” es para mucha gente la obra cumbre del escritor británico Alan Moore. La culminación de una carrera que ya había dejado para la posteridad episodios magistrales como “Miracleman”, “V de Vendetta” y “La Cosa del Pantano”. Una deconstrucción en doce capítulos de la figura del superhéroe y el arraigo y la necesidad de la mitología para el ser humano. Una obra donde lleva al límite todas las ideas expuestas en sus anteriores trabajos creando una historia autoconclusiva y sin resquicios a la que poco se puede objetar. 

Algún amago de crítica leí en su momento en el fanzine “Krazy Comics” centrada en aspectos formales de estructura con los que podemos estar más menos de acuerdo pero que carecen de peso ante la milimétrica complejidad que tuvo que elaborar su autor apoyado en el dibujo de el también británico Dave Gibbons que con su estilo contenido típicamente inglés aportó un realismo de trazo vigoroso y contexto sombrío alejado de la épica Marvel-DC. Una forma de entender la creación gráfica de historieta que los aficionados reconocimos por haber disfrutado en tiempos pretéritos relatos forjados con el arte de Enrique Giner (Inspector Dan), Jesus Blasco (Zarpa de Acero) y  con otros títulos populares en el Reino Unido publicados en nuestro país por Vértice como “Mytek”, Kelly Ojo Magico”, “Archie el robot”, “Spider” o por distintos editires como Tebeosfera, con series más inclinadas  al humor como las desventuras del pícaro ladrón “Carlitos Paz”.

Inevitable también recordar el arte presente en la revista "2000 AD" (IPC Magazines) con “Dan Dare” de Bellardinelli, material editado aquí por Dalmau y que también podría haber sido un referente para Moore a la hora de escoger un dibujante (adivinen quién es el artista que dibujó las tremendas historias explotation-ciencia ficción de los “Heroes de Harlem” que aparecían en la misma revista).

Es un tono estilístico suponemos que intencionado pues “Watchmen” viaja hasta los orígenes del justiciero enmascarado. 
El proyecto se gestó para DC comics, justamente donde nacieron los primeros superhéroes que gozaron de popularidad global: Superman, Batman o Capitan Marvel (SHAZAM, que se gestó y perteneció a Fawcett Comics hasta que DC compró la empresa en 1972) cuyas primeras aventuras plasmadas por Shuster, Kane y Charles Beck respectivamente tenían una ambientación y desarrollo naif deudor de la tira de prensa. Ya Moore exploró estos terrenos primigenios en la introducción del libro I de “Miracleman” la que es nuestra obra favorita del autor.


Dave Gibbons consigue para “Watchmen” una prodigiosa fusión entre el más tradicional universo DC y el estilo británico clásico anterior a “Juez Dredd”.

También achacaba el crítico fanzineroso al melenudo iluminado Moore que sus textos no alcanzasen la excelencia de Nietzsche, Faulkner o Henry James. Ok, no sabemos si en caso de que Moore decidiera escribir un libro en serio prescindiría de la cultura popular y se plantearía algo más académicamente correcto y creativo. Nosotros creemos que a “Watchmen” se le podría aplicar el mismo comentario que supuestamente John Byrne dedicó al “Ronin” de Frank Miller: “Lo que ha hecho Frank Miller es tomar el envoltorio básico y jugar con el. Lo retuerce. Lo transforma completamente. Y nunca olvida que es un comic book. Esa es la mayor alabanza que conozco”.

Moore que ya se había desentendido de la adaptación para la gran pantalla de “V de Vendetta” (2006) lo tenía claro con “Watchmen” cuando dijo que: “No debería haber gente interesada en hacer una película porque es imposible de hacer. No porque el cine no tenga el potencial de hacerlo, sino por el modo de trabajar de Hollywood. Ellos asumen que, si algo ha sido escrito una vez, es bueno, dos veces, es muy bueno, y tres veces será excelente. Al final, del guion original va a quedar muy poco en pantalla. En los comics tengo el control absoluto y me parece ridículo renunciar a ése control por el oro de Hollywood.” No se opuso a que Gibbons apareciese en los créditos del film de Snyder como co-autor de la idea original y que recibiese su legítima parte de los derechos más la proporcional correspondiente a Moore.
Pero antes de que el siempre audaz Snyder terminase al frente de este monumental proyecto otras curiosas iniciativas llenaban páginas de prensa con rumores de pre-producción que ponían los dientes largos al aficionado.

El productor Lawrence Gordon (“Xanadu” 1980; “Calles de Fuego” 1984; “Depredador” 1986) que fuera presidente de 20th Century Fox desde 1984 hasta 1986 parecía estar convencido de que había que hacer esta película. Al dejar la compañía compró los derechos de “Watchmen” que pertenecían a 20th y los cedió a su propia compañía Largo Entertenaint. Pero Largo se deshizo y Gordon se llevó el proyecto a Warner que propuso a Terry Gilliam para la dirección de la película. A Gilliam le pareció una basura el libreto que había preparado Sam Hamm, el guionista de Gordon y autor de los guiones de los “Batman” de Burton y pidió ayuda a Charles McKeown responsable de las adaptaciones para la pantalla de “Brazil” (1985) y “Las aventuras del barón Munchausen” (1988). A todo esto Alan Moore se había desentendido totalmente de cualquier propuesta de colaboración. Poco a poco fueron construyendo un desorbitado esbozo que incluía a Arnold Schwarzenegger en el papel de Dr. Manhattan, Kevin Costner como Buho Nocturno, Jamie Lee Curtis como Silk Spectre, Gary Busey como El Comediante y ¡¡Robin Williams!! como Rorschach. El guión definitivo incluía una resolución final en plan “Superman” (1978) de Richard Donner con vuelta atrás en el tiempo que intuímos no nos hubiera hecho ni puta gracia. Finalmente a mediados de los noventa y con 25 millones de dólares de los 100 que como mínimo pretendía Gilliam para rodar cinco horas de película el director lo dejó por imposible.
Gordon inasequible al desaliento contrata con el apoyo de Universal a David Hayter responsable de los guiones de “X-Men” (2000) y “X-Men 2” (2003). Hayter escribió un guión y dijo que contaba con la aprobación de Moore (¿?). Cuando parecía que todo iba a ponerse en marcha hubieron desavenencias con la Compañía y Gordon y Hayter acudieron a Revolution Studios que no pudo abarcar una empresa tan ambiciosa. Otro frenazo.
Y en 2004 es Paramount quien muestra interés en apoyar el proyecto con Darren Aronofsky como director pero un cambio en el plantel de ejecutivos y varios intentos de abaratar costes vuelven a hundir la nave.
Retomó Gordon entonces las conversaciones con Warner que decide echarse adelante rechazando el guión de Hayter. Se daba la circunstancia de que Gordon cuando salió de 20th se había comprometido a pagar por llevarse el proyecto “Watchmen” pero no lo había hecho. Con la película casi terminada demendaron a Warner que se vió obligada a hacer cesiones de taquilla y distribución.
“300” (2006) era una buena carta de presentación para que Warner escogiera a Zack Snyder para dar forma al apartado cinematográfico de esta enrevesada producción que parecía condenada a nunca ver la luz. Contrató al guionista Alex Tse que se apoyó en el trabajo de Hayter y utilizó el cómic original para plasmar con la mayor fidelidad la puesta en escena.
Tuvo que “conformarse” con un presupuesto de 100 millones de dólares y filmó cuatro horas de película que la compañía para su exhibición en cines mutiló hasta los 160 min. aproximadamente.
Y el film por fin vio la luz llegando a recuperar la inversión y obteniendo algo más de cincuenta millones de beneficio, cifras que están muy lejos de lo que se esperaba pero Lawrence Gordon puede darse por satisfecho porque su empeño llegó al final a convertirse en la que probablemente sea la mejor adaptación que se ha hecho de un cómic al lenguaje cinematográfico. No todo el mundo piensa que sea así. De hecho nosotros también podemos poner algunas objeciones pero pocas y desde el cariño.

ARGUMENTO:

A mediados de los años ochenta los superhéroes están prohibidos. La Policía se declaró en huelga porque les quitaban el trabajo y el Gobierno tuvo que legislar contra los vigilantes enmascarados. A excepción del todopoderoso Doctor Manhattan que lideró la victoria de los Estados Unidos en la guerra de Vietnam y de Rorschach que sigue por su cuenta en activo al margen de la ley.
La muerte de Edward Blake, identidad secreta de El Comediante, uno de los héroes retirados, llama la atención de Rorschach que descubre que Blake hacía trabajos sucios para la administración USA. Un intento de asesinato sobre Ozzymandias, otro enmascarado y lo que parece ser un complot contra el Dr. Manhattan hace sospechar a Rorschach que alguien está poniendo fuera de la circulación a los superhéroes. Intentará llamar la atención de sus antiguos compañeros Buho Nocturno y Silk Spectre pero estos no le toman en serio porque creen que está loco. Cuando es el propio Rorschach quien tiene que hacer frente a una emboscada la amenaza empieza a tomar forma y los camaradas deciden reunirse descubriendo pronto una trama con ramificaciones de múltiple alcance. Todo esto a la sombra de lo que parece un cada vez más cercano e inevitable conflicto nuclear entre los Estados Unidos y la Unión Soviética.

LA PELICULA:

Acudí al cine a sabiendas de que la película que iba a ver no iba a ser la adaptación imposible soñada por los fans de la obra magna de Moore. “V de Vendetta” (2006) me había parecido al menos correcta y en algunos pasajes me hizo disfrutar bastante. No pedía más.
El director Snyder ya había conseguido dos notables pelotazos con sus primeros films “El amanecer de los muertos” (2004) y “300” (2006). Con 43 años había demostrado poseer un talento innato para hacer buen cine manejando todos los adelantos técnicos a su alcance y ser un tipo osado que no se arredra ante nada.
Empieza la película y sí, estamos viendo al “Comediante” en su apartamento. Sabemos lo que va a ocurrir así que nos fijamos en la fotografía, en todos sus matices, hasta en los rincones más oscuros de la imagen. En la calidad del sonido, envolvente, dulce, áspero, violento, atronador… El film se rodó en celuloide en 35 mm Panavisión y el formato se amplió a 70 mm mediante proceso digital IMAX con relación de aspecto de 2.39 : 1. El director ya utilizó un sistema similar en “300” y aunque se trata de obras muy diferentes en “Watchmen” el resultado también es impresionante y un placer para los sentidos.
Centrémonos en el programa que está viendo Blake. Es importante porque a modo de prólogo nos introduce en situación, momento y lugar para entender los acontecimientos que vamos a vivir.
El maquillaje de Jeffrey Dean Morgan es muy meritorio porque vemos al actor como un robusto hombre maduro siendo en el 2009 siete años más joven de que se revelará como Negan en  “The Walking Dead” donde no atisbamos ni de lejos al personaje de el “Comediante”

Más puntos a favor del film: las coreografías de lucha creadas por Damon Caro , Richard Cetrone, Douglas Chapman y Matthew Rugetti. No importa que la escena esté en penumbra, se aprecian estupendamente los movimientos y las técnicas. Además el realismo en el cuerpo a cuerpo está bastante bien conseguido con momentos de bastante crudeza e incluso gore. Recuerdo que cuando “Watchmen” llegó a España y empezó la promoción televisiva vimos en un mercado a una mujer gitana preguntando a un negro del top manta que si la tenía para verla por la tarde con los chiquillos. Pensé que habría valido la pena observar las reacciones de la familia viendo la película. Probablemente la habrían quitado a los veinte minutos por aburrimiento si esperaban algo parecido a “Los cuatro fantásticos” (2005) o “Hulk” (2003).

Finaliza el preámbulo y nosotros tenemos en la cara la misma sonrisa que se dibuja en la chapita ensangrentada del “Comediante” acompañada por un leve cosquilleo de emoción.
Aparecen los créditos sobre unas bonitas fotografías animadas en tono sepia de los “Minutemen”, los primeros héroes disfrazados de combatieron el crimen en las calles de Nueva York en la década de los cuarenta. Suenan de fondo la guitarra, armónica y voz de Bob Dylan entonando “The times they are a-changin”. Hay que prestar atención porque se nos están proporcionando datos importantes que en el cómic se nos revelaban mediante los escritos de Hollis Mason complementarios a la historieta. También accedemos a recuerdos importantes en la vida de los protagonistas mostrando como influyeron en el contexto sociopolítico y cultural. Grande el momento en que Ozymandias eclipsa a Bowie, Jagger y a Village People en la entrada del “Studio 54”.

Así llegamos al momento actual (1985) en que suceden los hechos.  Estados Unidos bajo el mandato de Nixon y con la ayuda decisiva del Dr. Manhattan han ganado la guerra del Vietnam. En las calles de Nueva York la gente está en la calle manifestándose contra los vigilantes. La Policía está en huelga también contra ellos. Esto derivará en la promulgación de una ley que prohíbe los superhéroes.
Saltamos a la investigación policial en casa del “Comediante”. Se presenta “Rorschach”, un superhéroe de novela negra que viste con traje, sombrero, guantes, se mueve por los suburbios con nocturnidad y su voz en “off” es la que nos va guiando narrando las anotaciones que hará en su diario. Trabaja en la ilegalidad haciendo que se cumpla la misma ley que le ha convertido en un proscrito.

Hollis Mason, el antiguo “Buho Nocturno” recibe la visita de su sucesor en la carrera de justiciero Daniel Dreiberg que de vez en cuando le hace compañía y escucha sus historias.

La película está rodada en Canada pero los escenarios de Vancouver son fieles a las grises calles de los barrios trabajadores de Manhattan. En ocasiones la ambientación húmeda, lluviosa y sombría nos recuerda a “Blade Runner” (1982)
“Rorschach” se entrevista con Dan en la “búho-cueva” y nos deslumbra la escenografía que plasma en imágenes Snyder. Seguimos profundizando en la personalidad de los personajes.

Conocemos a Adrian Veidt un hombre de éxito visonario y millonario. No se oculta, se dedica a la investigación y a los negocios y aunque ya no ejerce de superhéroe vende merchadising de su personaje Ozymandias que sigue gozando de gran popularidad.

En instalaciones del Centro de Investigación Rockefeller, Rorschach visita a Dr. Manhattan y a su compañera Laurie Jupiter, la superheroína retirada Silk Spectre. Dr. Manhattan, envuelto en un permanente halo de luz azul es un personaje inquietante excelentemente representado en la pantalla. Se le supone todopoderoso aunque alberga emociones demasiado humanas.
La odiosa “99 Luftballons” del grupo alemán “Nena” nos devuelve a la luz del día y del reencuentro entre Laurie y Dan pasamos a “Sounds of Silence” de Simon & Garfunkel en el entierro del “Comediante”.

Brillante puesta en escena para un momento triste que nos invita mediante “flashbacks” a bucear en la memoria de los presentes en el acto y en como Edward Blake estuvo presente en momentos de la vida de cada uno de ellos:
Silk Spectre protagonizó con el finado un violento encuentro sexual no consentido con tintes sadomasoquistas. Definitivamente esta no es una película para niños.

El Dr. Manhattan recuerda como él en compañía del “Comediante” masacraban soldados del vietcong. Unas imágenes impresionantes.

Adrian Veidt descubrió que liderar a gente que está de vuelta de todo para formar un grupo de superhéroes nobles de espíritu iba a ser una tarea imposible.

Daniel comprobó que no todos los enmascarados compartían los mismos métodos para disolver una manifestación ni tenían el mismo concepto del sueño americano.

Y finalmente Moloch, enemigo del “Comediante” que recibe en casa a “Rorschach” que le somete a un particular tercer grado y le hace confesar una conversación que tuvo con un Blake que se mostraba abatido ante las evidencias que había descubierto sobre una conspiración.

En este punto tras las últimas reflexiones de “Rorschach” el género de ciencia ficción se va imponiendo al relato detectivesco pero sin desplazarlo del todo. Aún queda trama que desmadejar y un brutal paseo por el presidio.

La narrativa se mantiene fiel a la historia original. El espectador que busca acción a raudales se ha equivocado de película. Pero quien guste de paladear con paciencia las cosas bien hechas descubrirá por cortesía de Daniel y de Laurie que estos héroes no se limitan a dejar envueltos como un regalo de navidad a los malos derrotados para que los encuentre la Policía sino que no tienen demasiados prejuicios morales con romper huesos y hacerles sangrar en unas escenas de combate físico tan realistas como espectaculares.

Y para espectacularidad desbordante la escapada marciana del Dr. Manhattan. Imágenes puramente digitales que cuando las vimos en la pantalla grande del cine nos dejaron con la boca abierta por la impresión, aderezadas por la bellísima música de Philip Glass. Unas secuencias apabullantes de una magia, belleza y creatividad majestuosa.
En el planeta rojo nos sumergimos en los recuerdos de Ostrander, sus orígenes humanos y su transformación con momentos de pura ambrosía cinematográfica. La belleza y el horror se entremezclan dejando algún trance deudor de pesadilla cenobítica.
¿Es Dios el Dr. Manhattan? Una interrogante a la que Snyder sacará provecho inteligentemente.

Un atentado en público contra Adrian Veidt en su estudio profesional refuerza la alianza entre Dan y Laurie. En apariencia podrían confirmarse las sospechas de “Rorschach” de que alguien está eliminando superhéroes. 

“Buho Nocturno” y “Silk Spectre” toman el protagonismo y su reaparición nos deja escenarios cargados de emotividad y la liberación de la bestia interior que los mantenía castrados.
Malin Akerman tiene un físico espectacular, grande y fuerte. En las escenas de acción junto a “Buho Nocturno” proyecta una imagen poderosa y magnética.
El diario de Rorschah llega a su fin y el Dr. Manhattan revela el secreto bloqueado en los recuerdos de Laurie. Los acontecimientos se precipitan y el próximo acto será en casa del villano.

El inconfundible riff de “All along the watchtower” en la versión de Jimmy Hendrix ilustra la llegada de dos hombres a través del gélido viento antártico a otra fastuosa escenografía, la de la ciudadela donde asistiremos al último drama. No entraremos en más detalles por respeto a quienes lean esta reseña sin haber visto la película.


COMENTARIO:

En este apartado centraremos el comentario en la versión aligerada por decisión de productora y distribuidora que se estrenó en los cines. Después entraremos con la edición extendida.

"Watchmen" es un film que a pesar de sus más de dos horas y media y desarrollo pausado se nos hace corto. Demasiado. Una vez digerimos el placer experimentado con su visión nos queda una sensación como de vacío, de apetito insatisfecho pensando que podía no haber sido mejor sino más grande de lo que ya es. A veces aparenta un cierto esquematismo como de que algo se hubiera quedado en el camino entre algunas secuencias y de que no haya una conexión real entre los personajes y su entorno urbano cosa que estaba más cuidada en el tebeo original con multitud de personajes estratégicos que funcionaban como pequeños y diminutos engranajes que permitían el correcto funcionamiento de la maquinaria principal.

Para que un ser nos resulte extraordinario tiene que haber humanos mortales y sencillos con quienes compararlo. Los policías, la taxista, el quiosquero, el doctor de raza negra, su mujer y amistades, la fábrica textil donde trabajó Rorschach etc. son un ejemplo de actores secundarios que actúan de contrapeso en el cómic y aportan vida a la metrópoli tangencial a la de los protagonistas.

Realmente los superhombres que protagonizan la película son hombres normales a excepción del Dr. Manhattan. Gente corriente hasta que se ponen el traje y dejan en el armario sus complejos y debilidades terrenales para vivir su fantasía. Como el mamarracho que se toma cuatro copas para poder intentar seducir a alguien que en estado sobrio le resulta inalcanzable. Andar disfrazado por ahí no es precisamente síntoma de estabilidad emocional y “Watchmen” retrata esta condición con sutileza y reflexión en algunos casos unos y terrible crueldad en otros. ¿Son necesarios los vigilantes enmascarados o su humanidad los hace inestables y peligrosos?

El libro de Hollis Mason, el original “Buho Nocturno” es imprescindible para conocer la vida privada de estos sujetos. En la película se nos proporciona esta información de otra forma que se nos puede escapar si no estamos atentos desde el minuto uno y aun así descubrimos en posteriores visionados cosas que se nos habían escapado.

Pronto queda claro por ejemplo que el Comediante es agente del Gobierno pero no sabemos hasta qué punto hasta que se confiesa con Moloch, una conversación que en la película pierde un tanto de sustancia. Snyder se esfuerza por desarrollar toda la trama negra y teniendo en cuenta la densidad del original le queda bastante bien pese a las necesarias limitaciones.

Nos gustaría conocer todos los referentes que metió Moore en la coctelera para escribir “Watchmen”. Los personajes son adaptaciones de personajes de “Charlton cómics” una primitiva editorial de historietas estadounidense que recientemente había adquirido DC comics. Pero ¿y los referentes cinematográficos? Es importante porque se trasladan a la obra de Snyder. La huelga de policías nos recuerda a la de “Venganza sin ley” (1982) en la que un grupo de fascistas decide tomar las calles.

El cine de ciencia ficción de los setenta parece que también pesa en el espíritu de la obra, con la intriga política y la ciencia ficción de tintes conspiratorios. La serie “B” de toda la vida. El “Superman” (1978) de Richard Donner parece un claro referente, “Quinteto” (1979) de Altman, “Alarma catástrofe” (1978), “Zardoz” (1974), Cuando el destino nos alcance (1973), “Naves misteriosas” (1972), La amenaza de Andrómeda (1971), El programa final (1973), Colossus: el proyecto prohibido (1970),  El mensajero del miedo (1962),  Siete días de mayo (1968) etc. La refulgente estética de la animación marciana nos recuerda a algunos de los momentos más inspirados de Topor en “El planeta salvaje” (1973) o de Gerald Scarfe para “Pink Floyd The Wall” (1979).
Pero al menos desde nuestro punto de vista una de las influencias más patentes es la de “Blade Runner” por la distópica novela negra que sirve de base a la historia narrada en “off” por “Rorschach” el “cazador”, por la escenografía gris y lluviosa, por la figura del villano principal, un personaje que habla recitando, que físicamente está cerca de la perfección y parece carecer de emociones como un “Nexus 6”. Philip K. Dick decía haberse inspirado para imaginar a los replicantes en los soldados nazis que no mostraban empatía alguna cuando hacían su trabajo de exterminio en los campos de concentración. Y está presente la confrontación entre el hombre y el superhombre, como ya lo estuviera en “Miracleman”. Este “übermensch” busca trascender a través de un acto megalomaniaco que nos lleva a pensar que en su interior las cosas no eran tan brillantes como pretendía aparentar ante el mundo que le observa con admiración. Una oscura necesidad de reconocimiento por parte de aquellos a los que considera inferiores.

¿Es esta la mejor adaptación que se ha hecho de un cómic de superhéroes? Creemos que ningún otro realizador ha desplegado tanto talento cinematográfico en este género. Tal vez Bryan Singer que rueda sus películas con formas clásicas sobre las que plasma los FX. Snyder deja poco espacio para el clasicismo y aprovecha todas las posibilidades que le ofrece la tecnología para innovar y aplicarlo a su cine. Así que desde nuestra óptica subjetiva y limitada hasta el momento creemos que efectivamente “Watchmen” es la mejor película que se ha realizado sobre superhéroes seguida tal vez por “X-Men 2” (2003), “V de Vendetta” (2005) o “Sin City: Ciudad del pecado” (2005).

Snyder y su guionista se atreven a introducir una importante modificación del final que la primera vez que vimos la película nos llegó a parecer mejor incluso que el del cómic. Recupera la idea del Dios temible y vengativo como destructor y a la vez salvador y vigilante de la humanidad, la necesidad cultural de la religión y el temor al castigo divino para pacificar y unir al rebaño.
Sin embargo cuando volvemos al tebeo nos vuelve a enamorar el encanto pulp de esa criatura que recuerda al alien de “Contaminación (Alien invade La Tierra)” (1980). 

Moore sostiene que una nación para que permanezca unida debe ser asustada. Vamos a pensar que realmente tiene algo de mago y profeta pues Estados unidos se llevó un buen susto cuando cayeron las torres gemelas años después de la publicación de “Watchmen”. Cita el autor a Freya Stark “La sociedad que conoce el miedo no es la que se enfrenta a su extinción, es la sociedad que no lo conoce la que afronta la extinción”. Creo que Moore conoce poco al género humano. Un animal solo meterá  la pata en el fuego una vez. El hombre se quemará muchas veces a lo largo de su vida.
La idea del mito de los artistas y científicos reunidos pudo sacarla de rumores (o no) sobre la masonería, Illuminati, Golden Dawn o cualquier otra sociedad secreta que teóricamente pretenden manejar los hilos de la sociedad. O de proyectos como el de la isla  isla Huemul en la Patagonia argentina donde se juntaron unos cuantos físicos para desarrollar la fusión nuclear controlada, experiencia que tampoco pasaría desapercibida para los guionistas de la serie “Perdidos”.

LA VERSION EXTENDIDA DE 186 MINUTOS

Algunos de los “peros” que hemos puesto a la primera versión que se estrenó de la película desaparecen ante el “director`s cut” de tres horas. Esta sí que nos produce satisfacción casi total aportando momentos muy importantes que refuerzan la coherencia en la sucesión de acontecimientos y rellenan los huecos donde parecía que la trama avance a saltos.

-Encuentro de “Rorschach” con policías en casa del “Comediante”

-Reflexiones de “Rorschach” después de su charla con Daniel

-Aparece el personaje del quiosquero donde Kovacs compra el “New Frontiersmen” y el de el joven que lee las historias del “Carguero Negro”

-Los recuerdos de Laurie y el interrogatorio al que la somete el FBI

- Investigaciones de “Rorschach” antes de llegar a casa de “Moloch”

- Las conclusiones a las que llega el doctor de la prisión después de entrevistarse con “Rorschach”


- La secuencia completa del destino del primer “Buho Nocturno”

- El salvaje arrebato de Daniel reaccionando a la noticia que recibe en el pub donde él y “Rorschach” van a interrogar a los pandilleros.

LOS PERSONAJES

“Watchmen” no sólo es una radiografía del superhéroe, es un muestrario coral de todas las inquietudes humanas , de la vida en sociedad, de la política, de la maldad, de la bondad, del paso por la existencia y el sentido de la vida, del amor y la muerte, de la amistad y la necesidad de pertenecer, de la alienación, del conformismo, de la rebelión… El director del film llega argumentalmente hasta donde llega. Al igual que la puesta en escena no resiste la distribución de secuencias gráficas de Gibbons ni la diabólica simetría. Snyder es bueno y talentoso pero está lejos de ser Welles, Hitchcok ni Kubrick. No obstante cuida y saca partido del elenco protagonista para extraer lo mejor de los patrones ideados por Moore.

Rorschach clavado por el actor Jackie Earle Haley es un personaje de los que gustan a Zack Snyder, el antihéroe inquebrantable que seguirá firme en sus convicciones hasta el final. Es inevitable que se erija en protagonista como antes lo fuera C.J. en “Amanecer de los muertos” (2004) y “Leonidas” en 300 (2006). Dicen de él que es un chalado, en realidad es un pobre tipo necesitado de cariño que estaba (como diría Frank Castle) a un mal día de perder la cabeza. Y el día llegó. En la película se altera el homenaje de Moore a “Mad Max” (1979). Escena que si echamos de menos podemos verla en “The Walking Dead” cortesía de Rick Grimes y Merle Dixon. “Rorschach” es “The Spirit”, Marlowe, Mike Hammer, Deckard, la rectitud impecable en su cutrez que tiene que hacer su trabajo porque no hay otra salida para él. Ni siquiera tiene cara.





Daniel Dreiberg, “Buho Nocturno” es la cara amable del superhéroe, sin superpoderes pero con talento para crear un arsenal de artilugios que le permite combatir el mal es como “Batman” pero con un entrañable aire de ingenuidad. Llega a ser superhéroe influído por el primer “Buho Nocturno”. Parecía llevar bien el haber dejado de pelearse con los malos pero no. Un gran trabajo del actor Patrick Wilson, emotivo y con abundantes matices. Los actores de “Watchmen” desde luego que supieron aprovechar la oportunidad que se les presentó.
 
Laurie Jupiter, “Espectro de Seda” es hija de la original “Espectro de Seda”, se dejó llevar por el glamour y la aventura sin saber la cara oculta del negocio. Seducida por el Dr. Manhattan no tuvo problema alguno cuando la ley prohibió a los superhéroes. El relojero convertido en Dios se convirtió en su particular jaula de oro hasta que los acontecimientos la llevaron a hacerse preguntas. Icónica, creíble y contundente Malin Akerman en su papel, rubia natural con sus rasgos nórdicos endurecidos por la larga melena castaño-rojiza.

Adrian Veidt, “Ozymandias” es la figura deslumbrante del club de las máscaras. No esconde su identidad secreta y mantiene el cariño de la misma gente que quería lapidar a sus ex-compañeros. Huérfano desde corta edad se propuso un viaje iniciático para demostrarse a si mismo que podía alcanzar cualquier meta que se propusiera recorriendo los senderos de los grandes hombres de la historia. Pero algo le falta también y necesita compensarlo. Un personaje muy interesante interpretado por Matthew Goode a quien se le ha criticado por su fría



inexpresividad pero es que el personaje que interpreta es así, un tipo que se cree perfecto como un dios egipcio.

El nombre de “Ozymandias” ya apareció en un número clásico de “Vengadores” (USA Vol.1 Nº 59) en el que se toma un fragmento del poema de Percy Bysshe Shelley como epílogo para una de las encarnaciones metálicas de “Ultron”. También es adoptado para el título de un episodio de “Breaking Bad”. 
 

Billy Crudup es la cara y la voz de “Dr. Manhattan”, Jon Osterman. El cuerpo es una creación digital sobre la base del culturista Greg Plitt. Este personaje es el que hace que la película pueda ser considerada como un clásico del cine de ciencia-ficción por el insólito desarrollo visual de todo lo que envuelve su presencia, la historia de su origen, sus actos y las imágenes de Marte. Conceptualmente es uno de los pilares de la historia: Dios existe y es americano. Pero es un Dios que en ocasiones se muestra rencoroso, mezquino y manipulador. Está a gusto entre los humanos sintiéndose superior y haciendo lo que quiere hasta que las circunstancias le llevan a tener el “mal día” que le hace desprenderse de todo resto de humanidad y plantearse crear vida como cualquier Dios que se precie. Ya que le reconocen como tal decide serlo.

Jeffrey Dean Morgan interpreta al temible y oscuro Edward Blake, el “Comediante”. Un personaje atractivo y repulsivo a la vez pero que posiblemente sea el mejor retrato de la condición humana con su grandeza y miseria. Complejo y siniestro hasta extremos que no acabamos de descubrir en la primera aproximación al cómic y al film. No acabo de conectar con el supuesto humor que trata de imprimir Moore sobre “la gran broma” a la que Blake hace referencia como tampoco conecté con el de su obra “Batman: La broma asesina”. El humor del inglés funciona mejor cuando es sutil y negruzco que cuando intenta hacerlo evidente. Dean Morgan está presente con solvencia en algunos de los momentos más impactantes del film. Parece que este actor ha nacido para encarnar a míticos hijos de perra. ¿Quién recuerda algún trabajo suyo aparte del “Comediante” y de “Negan”? Nosotros ninguno.

MOMENTOS DESTACABLES:

- El principio en casa del “Comediante”. Excelente prólogo que nos va preparando para lo que viene.

- Los “flashbacks” con la cuidada ambientación escenarios y personajes en tiempos pasados

- El vestuario que retrata con bastante fidelidad las creaciones de Dave Gibbons

- Que Snyder no se reprimiese incluyendo escenas gore. Si había que buscar realismo había que ir a por todas.

- El pasaje de Vietnam. Es curioso que la escena de “Dr. Manhattan” y el “Comediante” en la cantina se repite a las puertas de la base antártica del villano. ¿Lo planeó así Moore, como un reflejo del horror que se quedó clavado en el alma de Ostrander, jugando con la simetría y el aprendizaje de la violencia?

- Marte y los recuerdos del Dr. Manhatttan. Entre el pulp y la fantasía científica con imágenes que permanecen durante días en la memoria después de ver el film.

LA MUSICA:

Odiamos los recopilatorios de grandes éxitos. Odiamos las emisoras como “Rock FM” que día tras día programan las mismas canciones que conocemos de memoria y han servido para anuncios de perfumes o telefonía móvil. Lamentablemente la banda sonora de “Watchmen” es eso. Son grandes canciones que encajan bien cada momento que ilustran pero esperábamos algo más de originalidad o riesgo. Tarantino por ejemplo tampoco presenta partituras originales pero se las arregla para recuperar temas desconocidos que se convierten en clásicos a partir del estreno de la película. Nos quedamos con la magia de Philip Glass en la que no estábamos en absoluto versados y que nos atrapa y hechiza en las secuencias extraterrestres.
A destacar que hay tres temas compuestos por Bob Dylan: “The times they are a-changin'”, “All along the Watchtower” y “Desolation Row” versión del grupo “My Chemical Romance” que es una agradable y cañera sorpresa para los créditos finales.

CONCLUSION:

Recomendamos a quienes no hayan visto esta película y estén interesados en verla que no pierdan el tiempo con la versión de 162 minutos y vayan directamente a la de 186. No hemos visto la de 215 pero suponemos que será todavía mejor aunque nunca hemos sido fans de los relatos del “Carguero Negro” que Moore introducía para subrayar aspectos de la acción en la historia principal.
“Watchmen” es una gran película como obra independiente del cómic. No complacerá a todo el mundo por la pausada literalidad de la narrativa pero si no nos ponemos puntillosos podemos asistir a un fastuoso espectáculo. Su grandeza permite poder revisarla varias veces sin que produzca fatiga y descubriendo siempre cosas nuevas.
Y para disfrutar plenamente la experiencia es aconsejable después de ver la película enfrascarse en la lectura del tebeo original y redescubrir todo lo que hemos visto en la pantalla con toda su extensión y profundidad.









Calidad Cinematográfica:  8,5
Gore:  6,5
Psicotronia:  8












Filmografías:

(Filmografías de director e intérpretes principales en este enlace)

-De Zack Snyder ya hemos comentado cosas en el texto de la reseña. Nacido en Wisconsin se preparó a conciencia para ser director de cine y el esfuerzo no fue en vano a la vista de los resultados. Tiene sus fans pero también sus detractores sobre todo entre los fans de DC que son muy quisquillosos. Estuvo a punto de dirigir “X-Men: La decisión final” y con toda seguridad el resultado hubiera sido por lo menos digno, no como el zurullo que hizo Brett Ratner. (2006). Después de “Watchmen” se metió en un par de proyectos un tanto extraños:  “Ga'Hoole La leyenda de los guardianes” y “Sucker Punch”.  En los últimos años parece haberse abonado al terreno de los superhéroes que garantiza rentabilidad:

-Malin Akerman nacida en Suecia de padres suecos destacó pronto como modelo en Canada. Quiso ir a la universidad pero le llovían las ofertas para hacer cine. De actriz en TV y secundaria en comedias mainstream para la pantalla grande tuvo la gran oportunidad de convertirse en superheroína con “Watchmen” y de ahí al estrellato. Además de actriz y modelo es la cantante solista del grupo rock “Ozono”/”The Petalstones”. Las niñas ya no quieren ser princesas, quieren ser Malin Akerman. Sus films:

-Billy Crudup oriundo de los suburbios neoyorkinos mostró desde la infancia inquietud por la interpretación. Se graduó en Bella Artes y estudió interpretación. Es un tipo que se toma en serio su trabajo y escoge roles exigentes aunque como “Dr. Manhattan” es complicado apreciar su talento entre tanta luz azul. En los flashbacks donde se le ve humano tal vez imprime más carácter del que se le supone al Dr.John Ostrander. Sus películas:

-Matthew Goode es el estirado Adrian Veidt. Nacido en Inglaterra y graduado en interpretación y arte dramático. Recuerda un poco a Jeremy Irons pero con rasgos faciales menos marcados y angulosos. Excelente intérprete aunque carece de magnetismo que le haga destacar. Curiosamente su primera película es española, una comedia costumbrista infravalorada de Fernando Colomo. Con Ozymandias se ganó un lugar en la historia de las adaptaciones cinematográficas de cómic-book. Otros trabajos:

-A Jackie Earle Haley  le cayó “Rorschach”, el premio gordo, y ya no podemos pensar en un Kovacs con un rostro que no sea el suyo. No nos cabe duda de que el pobre Robin Williams hubiera hecho un buen trabajo pero es que lo de Haley es acojonante. Nacido en California empezó en la interpretación desde niño. Es cinturón negro de taekwondo y Kempo. Como era coleguita de Johnny Deep estuvo a punto de ser “Freddie Krueger” en la original “Pesadilla en Elm Street” (1984). Años más tarde lo conseguiría en “Pesadilla en Elm Street. El origen” (2010). Su filmografía:

-El gran Jeffrey Dean Morgan también se apropió para siempre del personaje del “Comediante”. Hay quien dice que es mal actor. Bueno, no esperamos verle recitando a Shakespeare, nos basta con escucharle explicar a la pandilla de Rick Grames lo que piensa hacer con ellos. Aparte su filmografía es bastante cochambrosa aunque hay alguna cosa aprovechable desde el punto de vista psicotrónico.  Nacido en Seattle le gustan el basket, el beisbol, los animales, las barbacoas y conducir su Harley por rutas polvorientas. Filmografía:

-Patrick Wilson es el “Buho Nocturno”. De Norfolk (Virginia), actor de teatro graduado en arte dramático, colecciona premios y nominaciones. Antes de llegar a “Watchmen” participó en los castings de Los 4 Fantásticos (2005) and Daredevil (2003). Su trabajo como Daniel Dreiberg bordea la perfección. Y si no su “Arthur” en “Bone Tomahawk”. Sus películas:

-Carla Gugino es la original “Espectro de seda”, la madre de Laurie. Mujerona espectacular y buena actriz interpretando el mismo personaje con cuarenta años de diferencia gracias a un elenco de maquilladores fuera de serie. Podemos verla en todo su esplendor en “Sin City”. Nacida en Sarasota (Florida) hija de padre italiano y madre anglo-irlandesa se graduó con honores en la Universidad. Un cazatalentos la convenció para trabajar de modelo con quince años Pero se lo pensó mejor y tomó clases de interpretación. Empezó en la tele con diecisiete y ha hecho una buena carrera que está lejos de terminar:

-Hollis Mason es el veterano Stephen McHattie que se conserva bastante bien para la edad que tiene. Canadiense de presencia imponente estuvo casado con Meg Foster a la que conoció interpretando una biografía de James Dean. Filmografía:

-Laura Mennell tiene un rol secundario pero importante como primera novia del “Dr. Manhattan” y está espléndida tanto en su actuación como en su caracterización estilo años cuarenta. Canadiense. Trabajó con Isabel Coixet en Elegy . Es una activa luchadora por los derechos de los animales y  ha hecho bastante más televisión que cine: